Parece que, poco a poco, podemos ir saliendo de casa y las tiendas ya podrán abrir al público sin la obligación de pedir cita previa. Aún así, no podemos pensar que todo será como antes. Ni mucho menos. Pero sí que el hecho de entrar en una tienda, poder mirar tranquilamente, probarse alguna prenda da una sensación de volver a algunas de nuestras rutinas previas.

Para empezar, cabe decir que ahora mismo la medida más importante es la higiene, tanto del local como de las prendas. Esto significa que el comercio tiene que proporcionar gel higienizante (el cual es muy recomendable usar a la entrada y a la salida).
Otra rutina que también ha cambiado es coger, junto con las llaves de casa, el bolso, la chaqueta o lo que sea, la mascarilla. Y te lo dice alguien quien ha tenido que volver atrás más de una vez. Qué le vamos a hacer, pero es por responsabilidad: para protegernos a nosotros mismos y a los demás.

El siguiente paso es que puedan abrir las tiendas superiores a 400m2, pero las medidas de seguridad serán las mismas:
- uso de mascarilla
- lavarse las manos a la entrada y a la salida
- distanciamiento social con el resto de clientes
- las prendas, una vez probadas, se retiran, se higienizan y se dejan 48 horas aparte
- aforo limitado
- horario reducido

Otra cosa que podemos tener en cuenta como clientes y que no cuesta nada, es realizar el pago con tarjeta o con el móvil. De esta manera evitamos la circulación de dinero, que siempre es una fuente más de contaminación.
Todo ha cambiado y de hecho todavía no tenemos la perspectiva suficiente de saber lo diferente que será todo; aún así, la verdad es que la idea de poder volver a las tiendas, ver las colecciones, seleccionar alguna prenda, nos da cierta sensación de normalidad y, porqué no decirlo, de ilusión.
Que tengas un feliz día!
#LPSwithYou
#YomeQuedoenCasa